El peregrino, triste por la pérdida del caballero, se despide de nosotros por la mañana para continuar su
camino. Nosotros regresaremos al reino para contar lo acontecido al rey.
Por la
noche el rey recibe en audiencia a un emisario del caballero oscuro. El
emisario comunica a Arturo que el caballero oscuro nos desafía a una justa, Y el
rey Arturo, que nunca rechaza una confrontación, acepta el desafío con
valentía.
Tras escoger a cuatro nuevos caballeros, nos despide y nos aconseja
que descansemos porque el día siguiente va a ser muy duro.
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